Sí aún sigo de vacaciones, y tengo pocas ganas de escribir, pero me gustaría contaros este sentimiento que estoy disfrutando ahora mismo.
Mientras me dispongo para trabajar un ratito en la terraza del apartamento, mientras rugen las olas contra la arena sé que puedo desplazarme en cualquier momento de mi trabajo allá al final del horizonte. Tengo unas vistas espectaculares y casi se me quitan las ganas de bajar a la playa con ellas, estoy tan agustito en mi hamaca con mi portátil sobre la mesa, haciendo lo que más me gusta, que podría pasarme aquí el resto del año disfrutando aún con frío, que hoy no lo hace. Aunque una leve brisa golpea mi rostro y hace de mi piel gallina cuando se acerca a mis hombros…
Me gusta ver a la gente pasear por la orilla,, a otros tomar el sol en sus sillas y toallas, y a algunos de los atrevidos lanzarse con desparpajo contra las olas más tremendas… Es todo un regalo poder trabajar desde aquí, repito, no me importaría trabajar aquí siempre..
Buenos días a todos!